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Antioquia

Autoridades desmantelan cinco unidades de minería ilegal en San Carlos, Antioquia

En un operativo conjunto entre el Ejército y la Policía, fueron destruidas cinco unidades de minería ilegal en la vereda La Holanda, en San Carlos, Antioquia. Según las autoridades, estas estructuras, presuntamente controladas por la subestructura Pacificadores de Samaná del Clan del Golfo, producían cerca de 4.000 gramos de oro al mes, generando ganancias superiores a 1.600 millones de pesos.

Cinco unidades de producción minera ilegal que pertenecerían al Clan del Golfo fueron neutralizadas en San Carlos, Antioquia, en un operativo conjunto entre el Ejército Nacional y la Policía. Estas estructuras, ubicadas en la vereda La Holanda, extraían cerca de 4.000 gramos de oro al mes, generando ganancias superiores a 1.600 millones de pesos para este grupo ilegal.

El brigadier general Jorge Ricardo Hernández Vargas, comandante de la Cuarta Brigada del Ejército, explicó que “con este resultado se logra la afectación a las finanzas de la subestructura Pacificadores de Samaná del Clan del Golfo, grupo que adelanta acciones criminales que afectan tanto a la población civil como al medio ambiente”.

En el operativo participaron tropas del Batallón Especial, Energético y Vial N.° 4 y la Unidad contra la Minería Ilegal de la Policía Nacional, quienes incautaron e inhabilitaron cinco dragas tipo buzo y cinco motores, cuyo valor supera los 300 millones de pesos. Según las autoridades, estos elementos eran utilizados para la extracción ilícita de yacimientos mineros en diferentes afluentes de la zona.

El coronel Óscar Rico, comandante de la Policía Antioquia, indicó que este es solo uno de los múltiples golpes a la minería ilegal en el departamento. “Tenemos alrededor de 80 intervenciones en minas y cerca de 110 maquinarias destruidas e incautadas. En Porce III se realizó la destrucción de nueve retroexcavadoras y la incautación de un motor”, detalló.

Las autoridades advirtieron sobre las graves afectaciones ambientales derivadas de esta actividad ilegal. “Provoca deforestación, pérdida de biodiversidad y la contaminación de fuentes hídricas que abastecen a la población”, señalaron. En el caso de la intervención en San Carlos, se evidenció un fuerte impacto en los ecosistemas acuáticos de la región debido al vertimiento de sedimentos y químicos tóxicos utilizados en el proceso de extracción del oro.

Mientras se intensifican estos operativos, el 10 de marzo iniciará un nuevo paro minero en el que se exigirá la implementación de los acuerdos alcanzados con el Gobierno Nacional a finales de 2024. Desde la Mesa Minera Segovia – Remedios también han solicitado el cese de la incautación y destrucción de maquinaria en distintas zonas de Antioquia, argumentando que estas medidas afectan a pequeños y medianos mineros que buscan la formalización de su actividad.