Clan del Golfo ordena levantar el “plan pistola” contra Fuerza Pública

Alias “Chiquito Malo” o “Comandante Javier”, máximo líder del Clan del Golfo, dio la orden de suspender el denominado “plan pistola”, una estrategia criminal que durante tres semanas dejó un saldo de más de 30 uniformados asesinados en distintas regiones de Colombia.

Los ataques, que impactaron departamentos como Antioquia, Córdoba, Bolívar, Cauca, Valle del Cauca, Chocó y Norte de Santander, se intensificaron desde el pasado 15 de abril, días después de que fuera abatido alias Chirimoya, uno de los principales mandos de la organización. Según reportes oficiales, 24 policías y militares fueron asesinados y varios más resultaron heridos en atentados que incluyeron sicariatos y actos terroristas.

Las autoridades, por su parte, reforzaron la seguridad con medidas como el porte autorizado de armas de dotación fuera de servicio, la restricción del uso de uniformes en momentos de descanso y niveles elevados de acuartelamiento en zonas de alto riesgo.

En respuesta al plan criminal, la Fuerza Pública desplegó la operación “Agamenón”, logrando la captura de 217 presuntos miembros del Clan del Golfo, entre ellos 10 cabecillas conocidos con los alias de Gerónimo, Boliquezo, Haider, Chaco y Pipa. Además, las autoridades incautaron 123 armas de fuego, más de 15.600 cartuchos y 11 artefactos explosivos.

El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, declaró que “la ofensiva del Clan del Golfo ha sido una reacción desesperada a los golpes contundentes propinados por la Fuerza Pública”, mientras que la ministra de Defensa encargada, Ana Catalina Cano, destacó que “las Fuerzas Militares y la Policía han respondido de manera contundente, evitando que la amenaza avance”.

El Gobierno también ha ofrecido recompensas de hasta 200 millones de pesos por información que permita judicializar a los responsables de los asesinatos, mientras que las autoridades continúan promoviendo medidas de prevención y autocuidado entre los uniformados.

Cabe recordar que, según fuentes de inteligencia, el Clan del Golfo llegó a ofrecer entre dos y cinco millones de pesos por cada crimen ejecutado contra policías o militares. Aunque la mayoría de homicidios se ha atribuido a esta organización, también se investigan posibles responsabilidades del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y de las disidencias de las Farc.

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