El papa Francisco reaparecerá en público y recibirá el alta tras seis semanas en el hospital

El papa Francisco, de 88 años, será dado de alta este domingo 23 de marzo tras haber estado seis semanas internado en el Hospital Gemelli de Roma debido a una neumonía bilateral. Antes de abandonar el centro médico, el sumo pontífice saludará e impartirá su bendición desde la ventana de su habitación, en lo que será su primera aparición pública desde el 14 de febrero.

El Vaticano informó que el papa regresará a su residencia en Santa Marta, donde deberá continuar con una convalecencia de al menos dos meses. Aunque su estado de salud ha mejorado, los médicos han señalado que su voz aún se encuentra afectada y que necesitará tiempo para recuperarse por completo.

El doctor Sergio Alfieri, del equipo médico del papa, explicó que la convalecencia será un proceso lento y cuidadoso, lo que limitará su participación en actividades públicas y religiosas en las próximas semanas.

La prolongada hospitalización de Francisco ha generado incertidumbre sobre su capacidad para presidir los eventos de la Semana Santa, uno de los períodos más importantes del calendario católico. Hasta el momento, el Vaticano no ha tomado una decisión definitiva sobre su agenda.

Desde su ingreso al hospital el pasado 14 de febrero, el papa solo ha sido visto en una ocasión, a través de una foto publicada por el Vaticano en la que aparecía rezando en una capilla del hospital.

Francisco no ha presidido el Ángelus dominical desde el 9 de febrero, siendo esta la primera vez en su papado que ha faltado a esta oración por cinco semanas consecutivas. Por ello, la noticia de su aparición pública este domingo ha sido recibida con alegría por los fieles, quienes esperan verlo nuevamente.

A pesar de su frágil salud y de haber perdido parte de un pulmón en su juventud, Francisco ha mantenido un ritmo de trabajo intenso durante sus 12 años de pontificado. Sin embargo, esta crisis ha planteado interrogantes sobre su capacidad para continuar con el mismo nivel de actividad en el futuro.

Por ahora, la prioridad será su recuperación en Santa Marta, mientras la Iglesia Católica define cómo se reorganizarán las actividades en las próximas semanas.